Alessandro di Mariano di Vanni Filipepi, apodado Sandro Botticelli, fue un pintor cuatrocentista italiano. Menos de cien años después, este movimiento, bajo el mecenazgo de Lorenzo de Médici, fue considerado por Giorgio Vasari como una "edad de oro", un pensamiento que convenientemente encabezaba su Vita
de Botticelli. Su reputación póstuma disminuyó, siendo recuperada a
finales del siglo XIX; desde entonces, su obra se ha considerado
representativa de la gracia lineal de la pintura del primer Renacimiento, y El nacimiento de Venus y La primavera son, actualmente, dos de las obras maestras florentinas más conocidas.
Nació en Florencia, en un barrio de trabajadores en el arrabal de
Solferino. A esta misma parroquia de Solferino o Todos los Santos
pertenecieron los Vespucci, aliados de los Médicis, y de quienes
recibiría encargos.
En 1472
entró a formar parte de la Compañía de San Lucas, gremio de pintores. En
los años siguientes Botticelli se hizo muy famoso, hasta el punto de
ser llamado a Pisa para pintar un fresco en su catedral, hoy perdido.
Fue gracias a la Adoración de los Magos, que pintó en 1475 para Santa María Novella, llamó la atención de los Médicis, que rápidamente emplearon su talento. Comenzó a trabajar para ellos pintando un estandarte para el torneo de Juliano de Médici, ensalzado por Poliziano en sus Stanze.
Sus contactos repetidos con esta familia fueron sin duda alguna, útiles
para garantizarle protección política y crear las condiciones ideales
para la producción de sus numerosas obras maestras.
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